¡Cómo se las apañan los más pequeños para colarse entre los grandes! A menudo infravalorados por su tamaño, duración y dureza, no nos damos apenas cuenta de que en estos tres factores reside su fortaleza. Y si no, fíjate en CABO, un juego en una caja muy pequeña y muy sencillo de reglas, que se encuentra rodeado de juegos más densos, como The Gallerist, Revive o Tiletum.

Si estás buscando un juego rápido de explicar, fácil de aprender y jugar, échale un ojo a CABO. Las reglas son muy intuitivas, existe bastante interacción entre los jugadores y ofrece suficiente variabilidad para mantener el interés en múltiples partidas. Por supuesto, no deja de ser un juego de cartas con cierto componente de azar, pero que se puede ir mitigando a lo largo de las rondas. Además, siempre puedes decidir cómo de larga quieres que sea la partida, si a 100 puntos, como se indica en las reglas, o a menos, si piensas que la partida se te puede ir de tiempo. En resumen, CABO es un filler de esos que llamaríamos piscineros, de no ser porque estamos ya en noviembre y no pega decir eso.